:.:ruoppolo:.:

viernes, 26 de junio de 2009

Shh...

...I hate to say so much more.
You´re so much more,
endearing with the sound turn off...
Incubus-Talk shows on mute

La cantidad cotidiana de ruidos en la vida de un servidor es francamente alta, pero relativamente normal. Tal pareciera que el acostumbrarse a un panorama ruidoso es natural en un entorno urbano, o al menos el metropolitano en el que, afortunada o desafortunadamente, tiendo a desenvolverme. Mi punto radica ahí...ante el silencio me envuelvo, es insoportable tener la claridad en todas esas pretensiones de ideas, sensaciones y emociones que, como recién nacido, a veces me resultan desconocidas. El ruido alimenta un espíritu predispuesto por el empirismo de la vida cotidiana, las experiencias más rutinarias se han de enfrentar en medio del sonido interminable de una cadena de sucesos que podríamos llamar "un nuevo día".
La plena exposición de uno mismo ante sí mismo desnuda...deja en cueros la flaqueza que tanto pesa. Es pasmoso. Pero puede ser grandioso, lo malo es que no lo es siempre. Ahora mismo escribo con música de fondo, no vaya a ser que el mundo se calle, me deje sólo...me deje escucharme y entonces sí, no habrá a donde correr, y quién sabe qué me pondría a pensar. Quizás, sólo quizás, uno necesita envolverse en el silencio, para conocerse, presentarse...y luego desenvolverse, ya muy aparte del ruido. Quién sabe.
Por cierto, no sé si regrese para volver a escribir, creo que ésto es cosa de ratos.

jueves, 25 de junio de 2009

Qué triste...

...caminaré entre las piedras,
hasta sentir el temblor, en mis
piernas. A veces tengo temor,
a veces vergüenza...
Soda Stereo-Cuando pase el temblor.

Qué triste se ve un hombre triste que no sabe que lo está...es difícil imaginar qué cara pondría cuando se enterara de su estado. Si alguien tiene un espejo que se lo ponga en frente, o ya de plano que pase de largo y no se lo haga ver tan evidente. Pasar el tiempo en busca de señales que despierten la sensación más fina, que le recuerdan la vida en vida, es tan cruel como la historia de aquel preso que no ha visto la luz en años y de pronto, al salir, siente una ligera brisa...con la diferencia de que para nuestra triste caricatura de hombre triste, no hay tal esperanza, sólo rastros de sensación, y de una emoción que le confunde, además de que sesga lo que él piensa que son rastros de vida, de estar vivo pues. No sintió la brisa.
Lo "de hoy" es el desapego, pasar inadvertido entre un cúmulo de advertencias que nunca llegan a ser suficientemente evidentes y llamativas como para no pasarlas de largo. Lo de hoy es light, descafeinado y ambiguo. Se es sin serlo, y no se deja de ser...somos lo que ni siquiera sabemos que somos, y sin embargo seguimos siéndolo. No es asunto de conciencia, ni de reflexión; es cosa de sentir la brisa: que alguien le diga al hombre triste que se vale estar triste.
Por cierto, no sé si regrese para volver a escribir, creo que ésto es cosa de ratos.

jueves, 2 de octubre de 2008

2 de octubre no se olvida, 2 de octubre no te olvides...


...those where the days my friend,
we though they´d never end,
we´d sing and dance forever and a day
we´d live the life we choose...
Mary Hopkin-Those where the days





Hoy, como hace 40 años...!Goya!